Está claro que el verano es una maravillosa explosión de color. Durante los meses estivales está permitido jugar con una amplia gama de tonalidades, desde los suaves y luminosos pastel hasta los vibrantes y optimistas tonos flúor. Coral, rosas, rojos, naranjas, verdes, azules, amarillos... Mezcla sin miedo hasta lograr que tu casa transmita alegría, vitalidad y optimismo ¡Qué falta hace!
El blanco te ayudará a matizar la mezcla de colores. Si vas a combinar más de tres colores diferentes, lo mejor es que recurras a un fondo de blanco, incluso que este color esté presente también en parte del mobiliario y los textiles. Así evitarás que el ambiente resulte agobiante.
Si aún así, no te has decidido a la hora de combinar más de tres colores en intensas tonalidades, siempre puedes optar por jugar con una única gama de color. ¿Qué tal los azules? ¿Y los verdes? Son colores fresquitos y muy veraniegos que encajan con cualquier propuesta decorativa. Fotografías: Julia Hoersch a través de 79 ideas.
